Dentro de las etapas del desarrollo humano, coleccionamos un sinnúmero de vivencias, recuerdos, experiencias, conocimientos, construimos estructuras mentales, fÃsicas, emocionales, se establecen paradigmas que serán puntos de partida y pautas que marcaran lo trascendental de la existencia.
El atardecer de la vida llega como la época dorada, el momento en que se recogen los frutos de lo trabajado, lo invertido y lo vivido. Pero también es el tiempo en que el cuerpo empieza a funcionar de manera diferente, de tal manera que si hemos sido bondadosos con nuestro cuerpo cuidándonos apropiadamente, con una alimentación equilibrada (preferiblemente con alimentos orgánicos, frutas, verduras, leches vegetales, etc.), tomando suficiente agua, durmiendo bien, haciendo ejercicio, leyendo, escribiendo, manteniendo una vida activa, erradicando hábitos mal sanos que solo intoxican el organismo, recurriendo a las diferentes alternativas médicas entre ellas las homeopáticas y homotoxicológicas, que hay a la disposición para prevenir, tratar o curar las enfermedades. Seguramente que la degeneración progresiva y natural de nuestras células debido a la edad se verá postergada.
La demencia senil, está directamente asociada a esta época dorada, la tercera edad. Pero ¿Qué es la demencia senil y como podemos prevenirla?; esta situación se da por el deterioro de las células cerebrales, ocasionando que las funciones cognitivas declinen de manera gradual o progresiva, es decir que a medida que esta afección va abriéndose paso en nuestra vida, más difÃcil será recordar o mantener una lÃnea de tiempo coherente de sucesos, memorizar, comunicarse incluso tomar decisiones se torna complicado. El rango de edad en el que se presenta esta clase de demencia es aproximadamente entre los 75 y 80 años, no obstante en algunas ocasiones se hallan casos en que a los 65 años se están viviendo estos sÃntomas.
La demencia senil es irreversible, sin embargo como toda enfermedad o situación que afecte o malogre nuestra salud se puede prevenir; como se mencionaba anteriormente la alimentación, el ejercicio, el agua, en general el balance de nuestra vida es importantÃsimo. Hay que comenzar por ver nuestra salud y vida de una manera holÃstica, es decir hay que establecer y creer que nuestro actuar no es un cabo suelto sino que tiene consecuencias en nosotros y nuestro entorno, asà se puede entender que de nada sirve un tratamiento médico si no cambiamos nuestros hábitos alimenticios y de vida en general. Prevenir es la manera correcta de vivir para evitar quebrantos de salud, en el tema de la demencia senil prevenir es comenzar ahora mismo con el compromiso de hacer los cambios necesarios (nunca es tarde para aportar vida a tus años) todo es cuestión de actitud.
En temas de prevención hay tratamientos en fitoterapia muy provechosos, para mejorar la circulación a nivel cerebrovascular, eliminar problemas de insomnio, ansiedad, depresión, contribuyen a la buena memoria y capacidad de concentración, estos son solo algunos beneficios que esta terapia brinda para prevenir la aparición de esta afección. También se recomienda caminar y mantenerse dinámico, los juegos de mesa, leer, bailar, escribir (llevar un diario), hacer crucigramas, hacer ejercicios de motricidad (ejercita las extremidades), es importante estar en constante contacto con el médico, asà este le sabrá guiar un buen tratamiento preventivo contra la demencia senil, para que el atardecer de la vida sea aprovechado al 100%.