La terapia de las flores de Bach desarrollada hace más de cincuenta años por el médico e investigador inglés Edward Bach, es uno de los fenómenos más interesantes de la medicina alternativa contemporánea. Está basado en un concepto ausente en la medicina clásica: la relación entre el alma humana y la manifestación de la enfermedad, que tiene en cuenta el elemento psÃquico de esta. La medicina dominada por la quÃmica y la tecnologÃa puede ser capaz de eliminar los sÃntomas de la enfermedad, pero no sus causas: aumenta el conflicto entre el alma y el cuerpo y la curación se hace imposible.
El método curativo del Dr. Bach se basa en el hecho de que la enfermedad no sólo es el resultado de trastornos corporales sino que tiene su origen en sentimientos y actitudes negativas que bloquean nuestra energÃa vital.
El punto fuerte de la terapia de las flores radica en la normalización de los trastornos psÃquicos y en la resolución de los conflictos internos, asà como en la mejorÃa del dolor fÃsico con causas psÃquicas reconciliables o sÃntomas concomitantes.
Las flores de Bach no solo son adecuadas para el tratamiento armonizador psicofÃsico en enfermedades de todo tipo en ocasiones de modo adicional al tratamiento médico sino también para cuidar la salud y llevar una vida sana, puesto que estabilizan y eliminan los puntos flojos de tipo psÃquico.
Las Flores de Bach y su origen
¿Alguna vez ha observado a personas paralizadas por el miedo? ¿Ha escuchado a alguien remontarse a tiempos pasados donde las cosas eran mejores? ¿Se siente impaciente, tenso o deprimido? Los miedos, los traumas, la soledad, la falta de amor, la frustración, la desesperación y el resentimiento son emociones que han estado con nosotros desde tiempos inmemorables. Sin embargo, en esta época de notables avances tecnológicos, todavÃa tenemos que lidiar con ellas dÃa con dÃa. Esto no necesariamente es algo malo, pues nos ayudan en nuestro aprendizaje y superación personal. ¿Pero que sucede cuando sufrimos estas emociones durante todos los dÃas durante muchas semanas, meses o incluso años? ¿Cuál es el efecto que tienen en nuestra mente y en nuestro cuerpo?
La investigación del Dr. Bach
Para Edward Bach, estás cuestiones le llenaban de preocupación. Él era un médico del paÃs de Gales, en Gran Bretaña. Después de graduarse en Londres como médico, realizó notables trabajos de investigación en bacteriologÃa. Como médico, tenÃa un enorme deseo de ayudar a las personas, pero no estaba del todo convencido de la medicina que practicaba. Asà que se dedicó a la búsqueda de algún método menos agresivo, más sutil, benigno y suave. Fue entonces que tuvo contacto con la HomeopatÃa, en la cual también se destacó como médico e investigador, recibiendo el reconocimiento de sus colegas.
Después de algunos años de practicar la medicina en Londres con mucho éxito, se encontró con un hecho curioso: algunos pacientes que tenÃan la misma enfermedad tenÃan algunas otras caracterÃsticas similares, como su postura, su forma de hablar, sus gestos y sus expresiones. Empezó entonces a analizar a sus pacientes no solo por sus enfermedades y sÃntomas, sino por sus personalidades.
Por supuesto, necesitaba de un remedio para cada tipo de personalidad.
Esta investigación lo llevó a probar con sus pacientes algunos remedios basados en flores que recogió durante unas vacaciones en Gales. Obtuvo tan buenos resultados al prepararlos de forma homeopática, que decide mudarse definitivamente a Gales, para sumergirse en el desarrollo de una nueva medicina. De forma intuitiva empieza a recoger flores que percibe adecuadas para resolver los problemas de cada una de las personalidades que ha identificado.
El método que usa para preparar sus tinturas también es novedoso: en lugar de tomar los extractos de las flores y empezar a hacer diluciones, como se usa en homeopatÃa, simplemente recoge el rocÃo que ha quedado depositado en las flores por la mañana, y lo usa como tintura madre. Para su asombro, este rocÃo es suficientemente poderoso como para crear efectos significativos en las personas. Después experimenta sumergiendo algunos de los brotes de las flores en un frasco de cristal lleno de agua mineral, y dejándolos en el sol durante algunas horas, permitiendo que el sol transmita la energÃa de las flores al agua mineral, la cual queda convertida en tintura.
Después de experimentar los efectos de algunas tinturas de flores consigo mismo, y luego con plantas y animales, empieza a probar sus remedios con pacientes, recetándoles remedios de acuerdo a su tipo de personalidad en lugar de a sus sÃntomas. Debido a los sorprendentes resultados que obtiene, decide tomar una nueva filosofÃa en su investigación: Para corregir una enfermedad fÃsica, es necesario primero corregir los problemas mentales y emocionales del paciente.
A pesar de que esta idea es prevaleciente en muchas filosofÃas y medicinas tradicionales, era completamente novedosa en su práctica y la de sus colegas. Bach pensaba que el tratamiento de las emociones y la mente son fundamentales al momento de tratar las enfermedades fÃsicas. Al momento de corregir los problemas emocionales, los problemas fÃsicos pueden resolverse más fácil y rápidamente, y sin riesgo de que vuelvan a presentarse. A pesar del énfasis que se la ha dado al sistema floral de Bach para resolver los problemas emocionales, no debe de olvidarse su utilidad para corregir problemas fÃsicos.
Es asà como logra reunir 38 remedios, cada uno con una aplicación especÃfica para un tipo de personalidad, cada una con problemas mentales o emocionales. Estos 38 remedios están compuestos por 34 flores silvestres, 3 flores de cultivo y el último no es una flor, sino agua de manantial.
AsÃ, el Dr. Bach desarrolla una nueva medicina, sutil y eficiente, pero sobre todo relacionada con uno de los campos más descuidados por la medicina tradicional: las emociones. Además, es un sistema holÃstico, es decir integral, pues reúne la mente y las emociones con el cuerpo del paciente.
Lo que el Dr. Bach nos ha dado es una poderosa herramienta para la salud. Basta con tomar unas gotitas de los remedios florales para que una persona pueda superar miedos, depresión, impaciencia, soledad o traumas del pasado, entre muchos otros problemas emocionales, encaminándola a resolver los problemas fÃsicos asociados con esas emociones. Queda entonces la responsabilidad de sanarnos a nosotros mismos en todos los aspectos de nuestra persona.
Fuente
Cuauhtemoc F RamÃrez Arriola